La inestabilidad cambiaria que paralizó el ingreso de bananas extranjeras al país abrió una oportunidad productiva en Corrientes: la posibilidad de desarrollar plantaciones locales del fruto tropical. La iniciativa fue planteada por el vicepresidente de la Cámara Argentina de Actividad Frutihortícola, Marcos Danuzzo, quien confirmó que la entidad mantiene conversaciones con el Gobierno provincial para avanzar en un plan de forestación con banana en zonas aptas del territorio correntino.
"Existen áreas donde el clima y el suelo permiten cultivar banana. El proyecto permitiría autoabastecer a la provincia y a futuro abastecer a toda la región", señaló Danuzzo en diálogo con Radio Sudamericana.
La propuesta surge en un contexto complejo para el sector frutihortícola. Desde hace más de quince días no ingresan bananas importadas al país debido a la incertidumbre cambiaria. Las operaciones, que se pagan en dólares y a 30 días, fueron suspendidas ante la falta de previsibilidad, lo que derivó en un fuerte incremento de precios.
Actualmente, el kilo de banana ecuatoriana se vende en promedio a $6.000, mientras que el cajón pasó de $32.000 a casi $55.000 en pocas semanas con pronósticos de que podrían llegar a $60.000. "Es muy complicado porque no sabés qué puede pasar la semana que viene", advirtió el empresario.
Danuzzo detalló que el plan de producción local demandaría al menos dos años para concretarse: uno para la importación de los bulbos y otro para la implementación del cultivo. Aunque la iniciativa está en una etapa preliminar, el proyecto busca sentar las bases para una estrategia de autoabastecimiento y reducir la vulnerabilidad del mercado frente a los vaivenes económicos.
La provincia reúne varias condiciones favorables para el desarrollo del cultivo: temperaturas medias anuales superiores a los 20°C, alta humedad, buena luminosidad y suelos profundos con buen drenaje. Además, se requiere disponibilidad de agua para riego durante los meses más secos y protección ante las heladas ocasionales que pueden afectar el crecimiento del banano.
Según especialistas, regiones del norte y centro correntino presentan características agroclimáticas similares a las zonas productoras de Misiones y Formosa, donde el cultivo ya se realiza a pequeña escala.
La mayoría de las bananas que se importan a la Argentina provienen de Ecuador, que históricamente es el principal proveedor del país. Según datos del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) y de la Cámara Argentina de Frutihorticultura, entre el 85% y el 90% de las bananas que ingresan al mercado argentino son ecuatorianas. Bolivia y Paraguay aportan un porcentaje menor (entre 8% y 10%), principalmente por cercanía geográfica y menores costos logísticos.
En la previa a las elecciones, ya subió el precio del aceite en Corrientes
Algunas marcas de aceite vegetal comenzaron a llegar a los supermercados con incrementos en sus precios. Las primeras marcas son las que dieron el puntapié inicial en el camino al 26 de octubre, fecha en la que se especula un resultado ajustado para el Gobierno nacional que podría empujar el precio del dólar.
Uno de los que saltó rápidamente a la vista es la marca Cocinero de girasol que se puede conseguir por precio estándar de $3.090 por 900 cc, cuando hace unas semanas rondaba los $2.800. Mientras que la presentación de 1,5 litros ya llega a los $4.900, según una recorrida de diario época.
Otro que puede encontrarse por valores de entre $2.750 y 3.000 es el Cañuelas por 900 cc. Y el de 1,5 litros a $4.500.
Los Natura de 900 ml también se pueden conseguir por $3.000 y la presentación más grande llega a $4.900.
Incluso hay marcas como "Lágrimas del Sol" por 1,5 litros que se obtienen en las grandes cadenas por $4.600.
Como oferta, algunos mayoristas con venta al por menor ofrecen el Legítimo por $2.570 o Lira a $2.900. Más baratos se pueden conseguir "Lágrimas del Sol" por 900 cc a $2.300 en un supermercado de una importante cadena.
El precio del aceite vegetal que llega a las góndolas no responde a un único factor, sino a una combinación de variables que van desde el costo internacional de las materias primas hasta la política económica local. Aunque a simple vista parece un producto estable, su valor está fuertemente atado a los vaivenes del mercado agroexportador argentino.
El principal componente del precio es el valor del aceite crudo de soja o girasol, que se fija según los precios internacionales. Cuando el precio del poroto o la semilla sube en el mercado mundial por mayor demanda externa o sequías que reduzcan la oferta las refinadoras locales pagan más por la materia prima.
A ese costo se suman los gastos industriales: refinado, envasado, distribución y márgenes de las empresas procesadoras. También influyen los costos logísticos y energéticos.
Otro elemento clave es el tipo de cambio. Como buena parte de los insumos y el valor de referencia del aceite están dolarizados, cualquier variación de la moneda estadounidense impacta de manera directa en el precio interno.
Fuente: https://www.diarioepoca.com/1365557-proponen-plantar-bananos-en-la-provincia-para-abaratar-costos
